Este email se puede considerar una miniguía sobre la economía de fichas aplicada a enuresis. 

Por supuesto, antes de nada, hay que descartar causa orgánica o madurativa. Vamos a suponer que es así, y que la enuresis tiene que ver con factores emocionales. 

El segundo paso es averiguar si el niño o la niña quiere resolver el problema. Es una parte indispensable porque si no le molesta, va a ser complicado pedirle nada. En ese caso, habría que hacer otras maniobras antes. 

Para este email vamos a suponer que al niño o niña sí le preocupa lo de hacerse pis. 

Entonces preguntamos si alguna vez ha conseguido no mojar la cama (o el sofá o lo que sea). Buscamos excepciones. Anotamos. 

Luego podemos preguntar sobre qué le gusta hacer, aficiones, etc. La idea es buscar algo que le haga gracia. En mi caso, como cuando utilizaba esta técnica atendía a la población del sur de Sevilla, la mayoría me decían que le gustaba el fútbol y que eran del Betis. 

¿Entonces el Sevilla no te gusta nada, nada? ¡Noooo! ¡Viva el Betis!

Vale con cualquier cosa: Sevilla y Betis, Pokemon y Digimon, Spiderman o el villano de Spiderman. Lo que sea. 

La cuestión es que haya algo que le guste y otra cosa que no. 

Entonces le explicamos que tú no conoces a ningún adulto que se haga pis en la cama (o en el sofá o donde sea) así que asumes que todo el mundo aprende a retener el pis hasta llegar al wáter. Unos lo hacen antes y otros después. Añades que no sabes cuándo va a aprender él/ella pero estás convencida de que será pronto. 

Mientras tanto, le propones un juego para el que necesitamos la ayuda de sus padres. Aquí explicas la economía de fichas versión: Si hay un día que no te haces pis, gana el Betis. Si no, gana el Sevilla. Cogéis cartulina, pegatinas o dibujáis muchos escudos para ir poniendo todo. 

Es importante que tus padres colaboren: que vayan contigo a comprar el material, que estén contigo por si necesitas ayuda con lo que sea, etc. 

Por último, con los padres a solas, los típicos consejos: no decir nada del tema, no señalar nada, no dar importancia. Que transmitan la confianza de que en algún momento acabarán consiguiendo el control de esfínteres.