Si me dieran un euro por cada vez que alguien me contase un mito sobre los psicólogos…tendría un buen puñado de euros.
Que si leemos la mente, que si psicoanalizamos, que si somos perfectos y nunca nos alteramos, que si estamos todo el día manipulando a la gente…
En realidad, parte de la culpa de que la gente piense que los psicólogos hacemos “cosas raras” es nuestra, con ese secretísimo que nos traemos sobre lo que pasa en consulta. Nosotras no somos así e intentamos siempre explicar a nuestros pacientes qué podemos hacer para ayudarlos.
Aun así, siempre viene algún despistado que continúa con ideas equivocadas acerca de la psicoterapia.
Aquí van 5 cosas que nosotras no hacemos, al menos en consulta.
Leer la mente
Eso sí, somos expertas en hacer las preguntas adecuadas.Tampoco sabemos sacar el inconsciente de los demás, así que si alguien nos dice que se encuentra bien y nos explica por qué está mejor, nos lo creemos. No se nos pasa por la cabeza pensar que en realidad sigue deprimido pero todavía no se ha enterado.
Pillar las mentiras
En línea con lo anterior. Por defecto, nos creemos todo lo que nos cuentan los pacientes. Es más, al principio de la primera sesión les decimos que si hay algo de lo que no quieren hablar, que no lo hagan. No están obligados a hacerlo. Incluso a algunos les damos permiso para mentirnos si así se van a sentir más cómodos.
No vamos a jugar a adivinar si lo que me está contando es mentira o no. ¿Qué sentido tendría? Sería una pérdida de esfuerzo que no conduce a nada y preferimos centrarnos en otras cuestiones como es la de buscar una solución para que el paciente mejor.
Ser juez
En cuestiones de pareja, es habitual que alguna de las dos partes busque el que le demos la razón. Pero para eso hace falta un juez, los psicólogos rara vez hacemos esto, o al menos no deberíamos.
Si en algún momento nos ponemos de parte de alguien, será porque es algún caso muy excepcional y siempre con un fin terapéutico. Que el psicólogo te dé la razón no debería ser el objetivo de la terapia.
Sermonear al hijo (o hija/hermano/abuela/etc.)
Algunas personas van un paso más allá, y no se conforman con el veredicto del psicólogo sino que quieren que sea este el que convenza a la otra parte de que están equivocados y que si siguen así, acabarán mal.
Vamos, lo que quieren es que les echemos un sermón pero en plan profesional. Pues lo siento pero tampoco lo hacemos y por una sencilla razón: no funciona.
Cuando un padre le ha dicho 999 veces a su hijo que se ponga a estudiar y este no lo hace ¿qué le hace pensar que si se lo decimos nosotras el efecto va a ser distinto? En este caso, decírselo por milésima vez no va a cambiar nada, se lo diga yo o el ministro de cultura. Da igual, no va a funcionar. No lo vamos a hacer.
Cambiar por el paciente
El psicólogo puede escuchar, comprender, bromear, proponer, acompañar, resumir, concluir y muchas cosas más durante la terapia pero lo que jamás va a hacer es cambiar por el paciente. Al fin y al cabo si el paciente quiere que su vida cambie va a tener que empezar a hacer alguna cosa de forma diferente. Sólo el paciente es el responsable de cambiar su vida.
Por eso no nos lo tomamos como algo personal el que la persona que nos pide ayuda no haga lo que le proponemos. Podemos pensar que no se lo hemos planteado bien y probar de otra forma, o simplemente pensar que, al fin y al cabo, es su decisión no intentarlo.
Éstas son las 5 cosas que un psicólogo NO
puede hacer por un paciente ¿se te ocurre alguna más?
Faltan los deberes, muchos pacientes me dicen : estuve haciendo los deberes que me mandó la sesión pasada. Yo nunca mando deberes, solo señalo lo que me dice, los efectos, sus propias emociones. Cuando les pregunto ¿Qué deberes? Normalmente es una conclusión que sacó el mismo.pero muchos dice: hice los deberes!
Nosotras sí que sugerimos tareas para casa y nos hace gracia también lo de los deberes, como si fuera algo obligatorio XD